lunes, 20 de febrero de 2017

¿Qué es y cómo se desarrolla el modo de producción feudal para yuxtaponerlo después con otros modos de producción?

El feudalismo fue un modo de producción dominado por la tierra y por la economía natural. De ahí se derivaron tres características estructurales del feudalismo occidental, todas ellas de una importancia fundamental para su dinámica. En primer lugar, la supervivencia de las tierras comunales de las aldeas y de los alodios de los campesinos, los cuales, procedentes de los modos de producción pre-, feudales” “Europa occidental” en Transiciones de la antigüedad al feudalismo (p 148), de P. Anderson (2007).
El feudalismo como tal no fue homogéneo en el continente europeo, coexistieron variados tipos dependiendo en gran medida de la localidad y la herencia bárbara y romana del lugar, por ejemplo el esclavismo de los vikingos, sobrevivió ya muy avanzada la edad media, las zonas influenciadas por el imperio antiguo, mantuvieron algunas características en cuanto a lo administrativo y la posesión de tierras.
En segundo lugar, e incluso más importante que lo anterior, la parcelación de soberanías produjo en Europa occidental el fenómeno de la ciudad medieval. Una vez más, la génesis de la producción mercantil urbana” “Europa occidental” en Transiciones de la antigüedad al feudalismo (p 150), de P. Anderson (2007).Las ciudades medievales europeas que cuya tensión del modo de producción empujaría al final de la edad media muchos cambios socioculturales y el advenimiento del comercio ultramarino de una manera masiva, el cual cambio el destino de naciones estado como Portugal. Las personas que vivían en las ciudades nobles, señores feudales, etc. Obtenían su riqueza del plusvalor producido por sus siervos en el campo.
La Iglesia, que en la Antigüedad tardía siempre había estado directamente integrada en la maquinaria del Estado imperial y subordinada a ella, ahora se convirtió en una institución eminentemente autónoma dentro del sistema político feudal. Al ser la única fuente de autoridad religiosa, su dominio sobre las creencias y los valores de las masas fue inmenso, pero su organización eclesiástica era diferente a la de cualquier monarquía o nobleza secular” “Europa occidental” en Transiciones de la antigüedad al feudalismo (p 153), de P. Anderson (2007).La iglesia como institución se convirtió en hilo conductor entre el pasado clásico y el momento de transición hacia el feudalismo en Europa fungió como una especie de pegamento, amalgamando la herencia latina clásica, con las características espacio temporales de la zona donde se encontraba.
Por tanto, siempre es necesario recordar que la “justicia” medieval incluía realmente un abanico mucho más amplio de actividades que la justicia moderna, debido a que ocupaba estructuralmente una posición mucho más central dentro del sistema político global. La justicia era el nombre ordinario del poder. “Europa occidental” en Transiciones de la antigüedad al feudalismo (p 154), de P. Anderson (2007).La justicia afectaba muchos aspectos de la vida de las personas y a través de ella, los señores feudales, ministros religiosos, nobles, reyes, etc. Ejercían el poder sobre sus siervos.
En el siglo XIII, el feudalismo europeo había producido una civilización unificada y desarrollada que representaba un avance tremendo sobre las rudimentarias y confusas comunidades de la Edad Oscura” “Europa occidental” en Transiciones de la antigüedad al feudalismo (p 185), de P. Anderson (2007).Comienza con Carlo Magno, quien en gran parte fue responsable de la unificación de Europa bajo este modo de producción que antes de él se hallaba disperso.
Las innovaciones técnicas que constituyeron los instrumentos materiales de este avance fueron, esencialmente, la utilización del arado de hierro para el cultivo, los arreos rígidos para la tracción equina, el molino de agua para la energía mecánica, los abonos para la mejora del suelo y el sistema de rotación trienal de los cultivos” “Europa occidental” en Transiciones de la antigüedad al feudalismo (p 186), de P. Anderson (2007). Los avances técnicos durante el feudalismo, permitieron incrementar la producción del campo en gran medida (y con esto la riqueza de los señores feudales), también generaron toda clase de oficios especializados que se agrupaban en gremios y vendían estos productos en las ciudades, lo cual detonó el crecimiento de estas junto con su economía.
En la dinámica interna del modo de producción, y no en la llegada de una nueva tecnología, que fue una de sus expresiones materiales, es donde hay que buscar el motor básico del progreso agrícola” “Europa occidental” en Transiciones de la antigüedad al feudalismo (p 188), de P. Anderson (2007).En esta cita el autor hace alusión al hecho de que los siervos debían pagar determinada proporción de su producción al señor feudal, sin embargo al fijar un determinada cantidad de ese pago, los siervos tenían el incentivo de producir más para ellos.
El ejemplo más obvio de esto, ampliamente documentado por Bloch, lo constituye la introducción del molino de agua, que necesitaba una cuenca de cierta extensión para ser rentable y que dio así origen a una de las primeras y más duraderas de todas las banalités o monopolios de explotación señoriales: la obligación del campesinado local de llevar su grano para ser molido en los molinos del señor” “Europa occidental” en Transiciones de la antigüedad al feudalismo (p 189), de P. Anderson (2007). Esta es una forma más de dominio del señor feudal sobre sus siervos e establecimiento de un monopolio donde moler su grano, para así evitar que no le den la parte que le corresponde, causo el enojo de muchos de los siervos.
Un signo característico del papel señorial en el desarrollo de la economía feudal de esta época fue la expansión de la viticultura durante el siglo XII: el vino era una bebida selecta y los viñedos eran empresas típicamente aristocráticas que entrañaban un grado más alto de trabajo especializado y de rentabilidad que los cultivos de cereales” “Europa occidental” en Transiciones de la antigüedad al feudalismo (p 190), de P. Anderson (2007). Al existir una clase adinerada, esto propició la aparición de productos de lujo como lo era el vino, toda una industria, cuyo mercado era prácticamente inelástico y que resultaba muy lucrativo por encima de otros cultivos.
La roturación y conversión de tierras no cultivadas era, por tanto, la vía más fructífera de expansión de la economía rural en la Edad Media y la más espectacular expresión de la mayor capacidad productiva de la agricultura feudal. De hecho, entre los años 1000 y 1250 tuvo lugar un vasto movimiento de ocupación y colonización de nuevas tierras” “Europa occidental” en Transiciones de la antigüedad al feudalismo (p 191), de P. Anderson (2007). La expansión de la economía medieval fue de la mano con la transformación del entorno por parte de los agricultores, que se aventuraban a explotar tierras más allá del dominio del señor feudal, muchas veces ocurría que las tierras una vez transformadas y aptas para el uso agrícola, eran confiscadas a los campesinos, y repartidas entre los señores feudales.
La explotación de las regiones más remotas e inhóspitas, que se recuperaban para el cultivo o el pastoreo y necesitaban una proyección económica a largo plazo, era emprendida frecuentemente por las órdenes religiosas” “Europa occidental” en Transiciones de la antigüedad al feudalismo (p 192), de P. Anderson (2007).Esto es cierto sobre todo para las órdenes religiosas católicas cuyo voto de pobreza los hacía alejarse a lugares solitarios e inhóspitos que una vez pasado el tiempo y el trabajo de muchos años se transformaban en lugares habitables y las tierras se volvían fértiles, empujando los límites habitables por el hombre medieval.
La coerción extraeconómica de carácter político-militar fue utilizada también con toda libertad por las oligarquías patricias que llegaron a dominar las ciudades medievales: expediciones castigo contra los rivales, campañas para imponer peajes y levas al campo circundante” “Europa occidental” en Transiciones de la antigüedad al feudalismo (p 197), de P. Anderson (2007). Estas actividades para controlar el comercio y por ende la economía de una región en manos de unos cuantos señores feudales se convirtieron en un monopolio más de la era feudal, ahora el monopolio de la fuerza. La conquista de Constantinopla, que acabó definitivamente con los vestigios del viejo Imperio de Oriente, parecía consumar y simbolizar el vigor triunfante del feudalismo occidental.




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